fiestas en pijamas allá voy

las chicas hacen fiestas.
este sábado hay una, no quiero andar presumiendo,
pero no muchas veces fui a una fiesta organizada por chicas
y que sea una buena fiesta.
eso si, las chicas cuando hacen fiestas, son como las dueñas de casa, y están muy sueltas y presumen de su belleza, cosa que hace uno se vuelve un espectador tonto y tarde en actuar hasta que está muy borracho, se choca con la puerta y ce por una escalera.
luego del golpe entre despabilado y tratando de ocultar mi torpeza, avanzo.
saludo. eso me lo enseñó cañón, un hola siempre hay que tirar. te hacés el gracioso malhumorado. ofrecés algo de beber, bebés.
mirás y te vas.
si volvés y está en el mismo luigar que antes, te acobardás y te retirás. o bien le decís: mirá te quiero decir algo. pero antes decime vos, quiero escucharte. y cvuando empieza a hablar. le das un beso.
es un clásico que a mi nunca me resulta porque no lo aplico.
lo mío es más tipo groucho marz cuando solo tenía 4 centavos de dólar para estar 30 minutos en la habana fumando un puro pero en su cama. de golpe decía: vamos por unas chicas, y con 7 centavos compraba 2 kilos de mandarinas y al llegar, como ella no tenía timbre, le tiraba mandarinas a la ventana.